Su Historia
Solo hace falta observar con detenimiento los ojos de cualquier animal, para darnos cuenta del amor y la humildad que nos rodea, características que hacen valer la pena vivir en este mundo.
Oslo es el hijo de Viena, ambos son unas víctimas más de la crisis que tanto nos está afectando. Su “Familia” ha tenido que cambiar de casa y no entraban en los planes futuros….
Sería ideal una casa para los dos porque están muy unidos, pero sabemos que es imposible. Así que nos conformamos con encontrar familias responsables para ellos. Son unos ángeles y merecen una buena vida. Y él es todavía un cachorro de 1 añito…